En esta fechas tan especiales una buena dosis de dulzura viene muy bien. Dulces galletas y bombones preparados por mis hijos (con un una pequeña ayudita de mamá) como regalo de Navidad a sus queridas profesoras. Pero aún más, es la dulzura que desprenden los niños al entregar un regalo hecho por ellos mismos, orgullosos y felices del trabajo que han desarrollado.
Un precioso y personalizado detalle con mucho, mucho cariño.... ¿se puede pedir más?
Presentados en unos botes de cristal adornados para la ocasión con lazos, telas, etiquetas con bonitos mensajes y algún que otro complemento como unos cascabeles o estrellas de madera, las galletas y bombones serán un detalle exquisito en todos los sentidos.
Y como no
puede ser de otra manera, la dulzura se merece un envoltorio espectacular.
Tanto los bombones como las galletas son facilísimas de hacer, con recetas especialmente pensadas para preparar con los más pequeños. En el blog de Webos Fritos nos enseñan a hacer estos riquísmos bombones caseros con todo lujo de detalles y recomendaciones. Las galletas son cosecha propia, partiendo de una receta alemana que me envió mi hermana. Aquí os la dejo.
Ingredientes:
♣ 300 gr. mantequilla a temperatura ambiente.
♣ 100 gr. azúcar
♣ 2 cucharadas de azúcar de vainilla
♣ ralladura de ½ limón
♣ 1 huevo
♣ 150 gr. de almendras molidas
♣ 400 gr. de harina
Batir la mantequilla con los dos tipos de azúcar, la ralladura del limón y el huevo. Después. añadir poco a poco la harina y las almendras. Hacer una bola con la masa, envolverla en film transparente y ponerla en la nevera a reposar durante 2 horas (mínimo).
Después, extender la masa con la ayuda de un rodillo y cortar las galletas con cortadores de formas.
Precalentar el horno a 175°, colocar las galletas ya cortadas sobre papel de horno y hornearlas 10 minutos aproximadamente. Espolvorear azúcar glass por encima y dejar enfriar.
Os animo a probar la experiencia... están buenísimas y, además pasaréis un rato muy divertido haciéndolas. Pero lo mejor de todo, la cara de los niños cuando las regalan... no tiene precio.
¡Feliz fin de semana!